La paraestatal no se ha responsabilizado por los gastos médicos del hombre que cayó en la alcantarilla.
Tijuana BC. — El pasado martes, un trágico suceso ocurrió en el cañón Otay, cuando el señor Miguel Ángel, de 60 años, sufrió una caída en una alcantarilla que había estado destapada por más de tres meses.
A pesar de los repetidos reportes de los vecinos a la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Tijuana (CESPT), la entidad no había tomado medidas para colocar una tapa en la alcantarilla.
El señor Miguel Ángel sufrió múltiples lesiones graves. Las más preocupantes son las dos vértebras afectadas, las cuales podrían causarle parálisis en las piernas.
Además, presenta fracturas en tres costillas, una perforación en el pulmón, y diversas lesiones en las piernas.
Cristina Virrey Delfín, hermana del afectado, relató que su hermano tropezó con unos tabiques del mismo color que el suelo, lo cual lo desequilibró y lo hizo caer desde una altura de aproximadamente 10 metros.
Cristina señaló que la alcantarilla en la que cayó su hermano no es la única que se encuentra en tal estado, y criticó fuertemente la falta de atención de la CESPT a los reportes ciudadanos.
Exigió que la paraestatal asuma la responsabilidad de los gastos médicos que se han generado debido al accidente de su hermano.
Este caso pone en evidencia la urgente necesidad de que las autoridades correspondientes respondan de manera eficiente a las denuncias ciudadanas para evitar que situaciones similares vuelvan a ocurrir y garantizar la seguridad de los residentes.