Expediente Político…
Por: Alfredo Calva
El cúmulo de señalamientos por actos de corrupción que l regidor de Movimiento Ciudadano (MC), Mario Hernández Martínez, ha hecho en contra del titular de la paramunicipal ‘PRODEUR’ del VII Ayuntamiento de Playas de Rosarito, Héctor Fernández, finalmente hicieron erupción y el imputado explotó en la pasada sesión de cabildo y manifestó a los ahí reunidos, que el malestar del edil en su contra, es por no haber permitido que su hermano llevará a cabo un negocio con el cambio de luminarias del sistema de alumbrado público municipal.
Obviamente la declaración hecha por el funcionario municipal con un tono de inmaculada probidad, sorprendió a los ahí reunidos y generó que la atención se mantuviera en ambos personajes que durante meses han mantenido un conflicto que más que institucional parece de índole personal, en especial, por la molestia que los señalamientos de corrupción imputados a Héctor Fernández por parte del edil de MC, laceran imagen y capital político a su pareja sentimental y soporte de su permanencia en el gobierno de Mirna Rincón Vargas, la regidora de Acción Nacional, Ana Luisa Esquivel Fierro.
Durante su alocución, el director de ‘PRODEUR’ nunca hizo mención directa de que la propuesta del hermano del regidor Hernández Martínez contuviera o insinuara algún acto de corrupción, solo dejo en firme, que la actitud belicosa del edil hacia su persona y su trabajo en la dependencia que titula, su negativa hacia el hermano de que pudiera realizar un negocio que comprometería la finanzas de las arcas municipales, hecho que su honorabilidad le impedía aceptar.
Y hasta ahí el vodevil que se desarrollaba en la sesión de cabildo semejaba una obra dantesca que mostraba al dulce, tierno, inocente e inmaculado director de la Prodeur, emerger victorioso de su confrontación con las fuerzas del mal, sin embargo, la realidad tornó todo de nueva cuenta a su justa dimensión, que, aunque resulte cierto que le fue propuesto el plan de negocio por parte del hermano del edil, eso no oculta ni desaparece los señalamientos de corrupción que hay en su contra y que le han sido externados al Sindico Procurador, Miguel íngel Vila, quien hasta el momento no ha hecho ni dicho nada al respecto, pese a la presión que ejerce el regidor Hernández Martínez, para que actúe en consecuencia, y a la superior jerárquico de él, la alcaldesa Mirna Rincón Vargas.
Al respecto, cabe señalar que la inamovilidad de Sindicatura, ente responsable por mandato de ley de sancionar este tipo de denuncias, la expuesta por parte del representante de MC en el cabildo rosaritense, a generando en la comunidad la sensación de que más que una indolencia por parte del ente fiscalizador, su omisión es una acción de protección hacia el funcionario señalado, lo que contribuye a que el asunto se polarice y se torne personal como se vio en la sesión.
Cabe destacar, que Héctor Fernández ha sido señalado por el regidor Hernández Martínez, en acciones que se presumen de corrupción como lo son pavimentación de calles mal ejecutadas, construcción de infraestructura deficiente, colocación de luminarias que no cumplen con las normas pactadas y procesos de licitación amañados para beneficiar al constructor favorito de los últimos cuatro años conocido como el ‘Poblano’.
En contrario a la mórbida emoción que causaron los confrontados entre el público asistente a la sesión, el lloriqueo acusatorio por parte de Héctor Fernández en contra de Mario Hernández Martínez y las arrebatadas respuestas de éste, mostró y demostró la falta de respeto de ambos funcionarios a la investidura del cuerpo edilicio, a sus integrantes y a los rosaritenses.
Por lo que se vislumbra, el vodevil institucional ahora transformado en asunto personal continuará, el director de la Prodeur y su pareja la regidora Esquivel Fierro, buscarán alianzas a través del cobro de antiguas facturas e Irán tras la denostación desacreditación de Mario Hernández, y este a su vez, buscará la probanza de las presuntas acciones de corrupción en las que vincula a Héctor Fernández, lo que nos lleva a preguntar, ¿lo permitirán la alcaldesa Mirna Rincón y el Sindico Miguel íngel Vila?.
No creo que tardemos en saberlo.
Y mientras tanto’¦.
La codicia y la permanente alegría en la que vive el gobernador, Francisco Vega de Lamadrid, han convertido a Baja California en un estado fallido.